۲۵
خرداد

La tragedia de las ‘chicas radiactivas’. Chupaban radio para trabajar: las jefes les decian que era inocuo. Y como brillaba, algunas se maquillaban con el novio.

La tragedia de las ‘chicas radiactivas’. Chupaban radio para trabajar: las jefes les decian que era inocuo. Y como brillaba, algunas se maquillaban con el novio.

Asi se envenenaron miles sobre trabajadoras. Su asesinato fue horrenda desplazandolo hacia el pelo tuvo consecuencias laborales. Un nuevo texto reconstruye su leyenda. Por Fatima Uribarri / Fotos: Getty Images asi­ como Cordon Press

Le sacaron la muela, aunque el dolor no ceso y no ha transpirado la encia nunca cicatrizaba. Seguidamente se le cayeron nuevas piezas. Las llagas eran cada ocasii?n mas dolorosas y no ha transpirado el aliento apestaba porque se le estaban pudriendo las dientes. Amalia Maggia, una veinteanera estadounidense a la que llamaban Mollie, ya llevaba meses carente sonreir cuando dejo de hablar y no ha transpirado paso a comer lo infimo. El dolor era insoportable.

El radio era el arti­culo de moda. Se echaba en el agua, la ropa, las perfumes, la comida… decian que rejuvenecia

Seguidamente el inquietud se traslado a la quijada, la cadera y no ha transpirado bajo inclusive los pies. «Creiamos que era reuma. El facultativo le receto unas aspirinas», conto su hermana Albina.

Su boca se caia a pedazos. Literal. El medico le saco el hueso de la mandibula, tiro de el novio desde adentro sobre la boca sanguinolenta sobre Mollie en la informe. Se le quebraba en los dedos. El dentista estaba totalmente desconcertado. Debido a habia descartado la piorrea. Tenia que ser sifilis. No obstante las primeras competiciones dieron gafe. Necrosis por fosforo entonces, dedujo el dentista Joseph P. Knef.

Perdieron los dientes desplazandolo hacia el pelo los huesos sobre la mandibula, deformada por tumores. Las chicas que demandaron obtuvieron diez mil dolares cada la. Murieron todas

Pero Mollie no habia trabajado con fosforo. Lo habia hecho con radio asi­ como en los dias el radio era el elixir de actualidad, la panacea, la arreglo a todo prototipo sobre problemas.

Se habia conocido que el radio podia destruir tejidos humanos y se comenzo an utilizar Con El Fin De combatir contra las tumores cancerosos. En mirada sobre que tenia propiedades curativas le buscaron otros usos: contra la fiebre del heno, la gota, el estrenimiento… Se vendian en las farmacias pildoras y vendajes radiactivos, habia balnearios asi­ como clinicas para tratarse con radio. Se vendian jarras revestidas con este aspecto que convertian en radiactiva el agua: se recomendaba recibir entre cinco asi­ como siete vasos diarios. Tonificaba, rejuvenecia. Era un agua excesivamente rostro: a unos 3700 dolares de en la actualidad el litro.

En 1898, Marie y no ha transpirado Pierre curie descubrieron el radio. A Principios del siglo XX se puso sobre tendencia. Se decia que tonificaba asi­ como rejuvenecia: era lo mas en productos de encanto. Se usaba en cremas, dentifricos, maquillajes…

Imperaba la fiebre del radio. Incluso en las transistores retumbaba la cancion Radium dance. El llamado ‘sol agua’ entro en hospitales, teatros, boutiques y no ha transpirado tiendas sobre ultramarinos. Se vendia ropa interior con radio, mantequilla, leche, dentifricos, maquillaje, pintalabios y no ha transpirado cremas faciales.

Hasta en aerosol igual que insecticida: «Mata de forma rapida moscas, mosquitos, cucarachas, aunque seri­a inocuo de las personas asi­ como facil sobre usar. Nunca tiene parangon en la limpieza de muebles, porcelana y azulejos», se proclamaba en la propaganda.

Las trabajadoras pintaron con radio instrumentos sobre revoloteo, relojes y brujulas utilizadas en la Primera conflicto Mundial. Chupaban los pinceles Con El Fin De afilarlos

La emocion por el radio y el padecimiento atroz de Mollie se encuentran conectados en una tragedia real asi­ como espantosa que cuenta la cronista britanica Kate Moore en el texto Las chicas del radio (editorial Capitan Swing). Seri­a la recreacion detallada sobre un drama que tuvo sitio en Estados Unidos desde 1917 hasta las anos treinta. Documenta la contaminacion radiactiva que destruyo a miles de trabajadoras. Seri­a Algunos de los escandalos laborales mas sobrecogedores sobre la historia.

Mollie Maggia (tercera por la derecha), con las companeras. Igual que brillaba, algunas se untaban radio en unas asi­ como dientes Con El Fin De gustar a las novios

Mollie Maggia habia trabajado en una de estas companias que utilizaban el radio, en Radium Luminous Materials Corporation, una factoria de esferas para relojes en Newark (EEUU). Si se impregnaban las manecillas de las relojes con una pintura que contenia radio, se lograba que brillaran desplazandolo hacia el pelo se pudiera leer la hora en la oscuridad. Cuando Mollie entro a trabajar alli, en 1917, se libraba Durante la reciente conflicto Mundial y no ha transpirado esos relojes visibles en la noche eran excesivamente demandados para los soldados. Igualmente se ‘iluminaban’ miras sobre fusil, brujulas de barco e instrumentos de planeo.

Mensajes escondidos

En la primavera de 1917, las pintoras de esferas estaban extremadamente demandadas. Contrataban a jovencitas: quince anos de vida tenia, por ejemplo, Katharine Schaub. Igual que adolescentes que eran, en ocasiones marcaban su apelativo asi­ como direccion disimuladamente en las relojes que pintaban. A algunas les escribieron de giro varios soldados. Algunas se pintaban las unas e hasta se untaban los dientes para presentarse ‘brillantes’ ante las novios.